Los nuevos modelos 2012 Back Jac y Aquaride adoptan de serie esta evolución del sistema de lastre LAS (Lock Aid System). Este sistema convive en la colección con el tradicional C-Trym System y con el nuevo L.A.S. 1.0 ya que todos ellos tienen argumentos técnicos para coexistir en el mercado.
L.A.S. 2.0 se basa en un sistema horizontal de inserción/desinserción de los bolsillos situado en la zona frontal del chaleco. Siguiendo la idea Cressi de que la gestión del lastre debe poderse realizar de forma automatizada e intuitiva, incluso con el chaleco colocado y en malas condiciones (en flotación, con mar agitada, etc.), se ha trabajado muy a fondo la facilidad de inserción de los bolsillos. Éstos entran perfectamente encarrilados en sus sedes y además una anilla “D” situada en la boca del acceso facilita la tensión del tejido y la directa entrada de la bolsa evitando que los lóbulos del chaleco retrocedan dificultando la entrada de los bolsillos.
Respecto de la versión anterior, L.A.S. 2.0 reduce considerablemente el volumen y peso de su estructura, tanto en la parte anclada en el chaleco como en la que va fijada en el bolsillo. El sistema es mucho más discreto, hidrodinámico y permite utlizar el chaleco sin el sistema de lastre si el buceador así lo prefiere, por ejemplo para un viaje de buceo.
L.A.S. 2.0 mantiene otras de las prioridades consideradas:la seguridad ante las tan habituales pérdidas accidentales del lastre. Cressi ha conseguido que la maniobra de desenganche del bolsillo tenga un efecto muelle de 15 mm de recorrido que compensa posibles enganches accidentales con cabos, etc. El buceador, al extraer el lastre de su compartimento, no detecta absolutamente ninguna dificultad aunque realmente está cubriendo dos fases: la primera, de compensación y a continuación la de desenganche real.
Los bolsillos están reforzados con una placa rígida para facilitar su deslizamiento. Son comunes a todas las tallas, de la XS a la XL, e idénticos, tanto para el lado izquierdo como para el derecho, lo que facilita la gestión de recambios a los comercios y permiten una capacidad de hasta 4,5 kg cada uno con lastre flexible.
L.A.S. 2.0 sigue la idea Cressi de que la gestión del lastre debe poderse realizar de forma automatizada e intuitiva, a ciegas, incluso con el chaleco colocado y en malas condiciones (en flotación, con mar agitada, etc.), se ha trabajado muy a fondo la facilidad de inserción de los bolsillos. Éstos entran perfectamente encarrilados en sus sedes de forma casi automática.
Bolsillos reforzados con una placa rígida para facilitar su deslizamiento. Son comunes a todas las tallas, de la XS a la XL, e idénticos, tanto para el lado izquierdo como para el derecho, lo que facilita la gestión de recambios a los comercios y permiten una capacidad de hasta 4,5Kg cada uno con lastre flexible.
Una anilla “D” situada en la boca del acceso facilita la tensión del tejido y la directa entrada de la bolsa evitando que los lóbulos del chaleco retrocedan dificultando la entrada de los bolsillos.
La maniobra de desenganche del bolsillo tiene un efecto muelle de 15 mm de recorrido que compensa posibles enganches accidentales con cabos, etc. El buceador, al extraer el lastre de su compartimento, no detecta absolutamente ninguna dificultad aunque realmente está cubriendo dos fases: la primera, de compensación y a continuación la de desenganche real.
Pomo semiflexible con tacto adherente.
L.A.S. 2.0 sigue la idea Cressi de que la gestión del lastre debe poderse realizar de forma automatizada e intuitiva, a ciegas, incluso con el chaleco colocado y en malas condiciones (en flotación, con mar agitada, etc.), se ha trabajado muy a fondo la facilidad de inserción de los bolsillos. Éstos entran perfectamente encarrilados en sus sedes de forma casi automática.
Bolsillos reforzados con una placa rígida para facilitar su deslizamiento. Son comunes a todas las tallas, de la XS a la XL, e idénticos, tanto para el lado izquierdo como para el derecho, lo que facilita la gestión de recambios a los comercios y permiten una capacidad de hasta 4,5Kg cada uno con lastre flexible.
Una anilla “D” situada en la boca del acceso facilita la tensión del tejido y la directa entrada de la bolsa evitando que los lóbulos del chaleco retrocedan dificultando la entrada de los bolsillos.
La maniobra de desenganche del bolsillo tiene un efecto muelle de 15 mm de recorrido que compensa posibles enganches accidentales con cabos, etc. El buceador, al extraer el lastre de su compartimento, no detecta absolutamente ninguna dificultad aunque realmente está cubriendo dos fases: la primera, de compensación y a continuación la de desenganche real.
Pomo semiflexible con tacto adherente.